miércoles, 13 de mayo de 2020

Por la Calle de San Francisco, con Jesús Barros. (Final del recorrido)

Calle de San Francisco con el cubo del reloj al fondo durante los años 20 del pasado siglo. 


Si hay algo que justifique este relato es precisamente que recuerda lo sucedido entre las fotos que lo acompañan. Una corresponde a los años 20 del pasado siglo y otra a la realidad. La primera es esperanzadora, transmite sensación  de que se avanza,  la segunda muestra el estado en que se encuentra actualmente esta calle. Ojalá signifique que para levantar primero hay que caer. Soy pesimista.

En el número dos de la calle estaba la casa de Luis España. Tenía la fachada de granito y una reja de forja salvaguardando la ventana. A esa ventana   subíamos para protegernos de las vacas, cuando los encierros en san Roque se hacían por esta calle. Debía de ser muy fuerte y estar muy bien sujeta a la pared, aguantaba a muchos. En los primeros años de la década de los cincuenta dieron la orden de encalar las fachadas. ¡Blanquearon hasta la del convento! Luis España se plantó, dijo no, y la casa siguió luciendo sus piedras. Se decía que Luis, abogado aún que no ejercía, era “raro”, desconfiado, de difícil trato y tacaño. Cuando la comisión para fiestas que menciono en el otro lado de la calle, unos cuantos fuimos a pedirle colaboración económica. Llamamos, abrió la puerta y  mandó que pasáramos al despacho que tenía a la izquierda del portal. Sentados, nos echó una filípica anti taurina y cuando, con la cabeza baja, nos levantamos para salir, dijo: - Esperad. Abrió la caja y puso en nuestras manos un billete de mil pesetas. Todos salimos con los ojos a cuadros.

sábado, 2 de mayo de 2020

Por la calle de San Francisco

Comienzo de la Calle de San Francisco desde la Plaza Mayor. (FOTOGRAFÍA: Daniel Ferreira)



San Francisco supongo que es el nombre que lleva la calle desde la construcción de la iglesia y del convento de franciscanos que a mediados del S. XVI Francisco Enríquez de Almansa erigió en su honor. Yo tengo la teoría de que la hizo para salvar a su hija Ana que, acusada de hereje, no sufrió condena en el auto de Fe de Valladolid (Ver el Hereje de Miguel Delibes). 

La calle dejó de llamarse así en la época de Franco y pasó a ser General Mola, aunque solo en la teoría. Los de Alcañices siempre la llamamos San Francisco. El cambio del nombre de las calles siempre ha pasado afortunadamente desapercibido, para la gente carecía de importancia. No somos mirados en eso, bueno, ni en nada. A la circunvalación me remito.

lunes, 27 de abril de 2020

Vamos a la Plaza



Vista panorámica de la Plaza Mayor de Alcañices. (FOTOGRAFÍA: Daniel Ferreira)
Aunque no está muy centrado, el edificio del ayuntamiento preside la Plaza. En Alcañices hay más plazas pero esta es la Plaza por antonomasia En tiempos anteriores desde sus  balcones se leían los bandos, se declamaban las proclamas y daban los partes de la guerra. El edificio actual es posterior a 1975 y, es mi opinión, no mejoró ni en estética  y creo que ni  en  disponibilidad para la prestación de servicios al público y eso que fue ampliado con la comisaría de policía y la casa de Tomás España. El antiguo tenía unos arcos de piedra de granito, en el soporte del primer arco pusieron la primera fuente de grifo del agua de Cubillas, que felizmente, y gracias a Tomás Domínguez Parra, “Chepita”, siguen en el pueblo adornando el patio de las escuelas. De cómo y cuándo el edificio fue derruido, existe un vídeo realizado por Jimmy, el marido de Sara. Por las mejillas de algunos que lo vieron rodaron las lágrimas.

lunes, 20 de abril de 2020

La calle del Hospital

Calle de El Hospital vista desde la Plaza Mayor de Alcañices. (FOTOGRAFÍA: Daniel Ferreira)

Tina  Gallego me llamó para comentarme que en el paseo por la calle los Labradores había algo que no se ajustaba a la realidad. Tenía razón y  le agradecí la puntualización. Charlamos un rato y me preguntó que si iba a escribir de otras calles y otras gentes. Le dije que no me atrevía, pero con esto del confinamiento, que parece que va para largo, voy a atreverme a hacerlo de sitios en los que de pequeño corría y jugaba. Entonces  los niños éramos los  dueños de las calles, no había en ellas ni un solo coche y podíamos correr sin problemas por todos los sitios.
 Escribo basándome únicamente en mi memoria, por tanto es posible que la descripción que hago no coincida con la que otros tengan de los lugares que describo. Todo puede ser.

Esquina a los Labradores estaba la Alhóndiga, institución que creó el primer marqués de Alcañices, Francisco Enríquez de Almansa, junto a su mujer la toresana Isabel de Ulloa, al tiempo de la del hospital de san Nicolás. Ambas fueron registradas en la misma escritura y dotadas con juros que los marqueses tenían en Zamora, Toro y Valladolid. Estas fundaciones tuvieron problemas en su comienzo, pues la marquesa en los tiempos de su creación se fue para Toro sin haber firmado la escritura. 

miércoles, 15 de abril de 2020

Última jornada del paseo por la calle Labradores.

Vista de la calle Los Labradores (FOTOGRAFÍA: Daniel Ferreira)


Habíamos subido la empinada cuesta de la calle, nos habíamos introducido en el espacio  que se abre hacia la derecha y ahí lo dejamos. Hoy vamos a caminar hasta la calle del Hospital, que es la parte  que nos queda por hacer. Como es una zona llana, creo que lograremos hacer el recorrido sin tropiezos.

Lo primero que nos encontramos es la casa de Ángel Lorenzo de la Iglesia “Anchil” en la que vivió con su mujer y donde se criaron sus cuatro hijos. En los años cincuenta, la vivienda sufrió un incendio del que quedó maltrecha, pero la solidaridad de los vecinos -nadie o muy pocos tenían seguro de incendios- hizo que el edificio fuera levantado de inmediato. Los labradores, tanto de la misma calle como de otras de la localidad, con sus carros transportaron las piedras necesarias para levantar el nuevo edificio. También alguno que sabía de albañilería colocó piedras  y la casa quedó dispuesta, incluso mejorando la anterior. 

viernes, 10 de abril de 2020

Tercera jornada del paseo por los Labradores

FOTOGRAFÍAS: Daniel Ferreira

¡Cómo se nota que soy mayor! En los tiempos que aquí se tratan bajaba y subía la calle corriendo en cinco minutos, ahora me va a llevar cuatro jornadas. Veo que lo que pasa rápido es el tiempo, va absorbiendo nuestra energía, nos parasita,  por eso nosotros cada día vamos  más lentos. Esta reflexión me hace recordar los versos de Cervantes en  el Quijote del Dialogo entre Babieca y Rocinante: B. 
Metafísico estáis /R. es que no cómo.
Bueno, dejémonos de filosofías y a empezar con ánimo la cuesta que es empinada.

domingo, 5 de abril de 2020

Continuación del paseo por la calle Labradores de Alcañices.

FOTOGRAFÍAS: Daniel Ferreira

Estas descripciones las hago en la distancia basadas en los recuerdos y vivencias que tengo de la niñez. Del relato del paseo anterior he corregido algunos errores que son  la consecuencia de fiarme de mi vieja memoria. Seguro que en este también los hay, si algún lector los detecta le ruego que me los señale  para corregirlos, lo agradecería. El relato unas veces está   en pasado y otras en presente, es una mezcla de los dos tiempos. Me siento  acompañado por los casi quinientos lectores que  están haciendo estos días el recorrido conmigo por eso a veces utilizo el plural.

Continuamos el paseo por la calle los Labradores.

miércoles, 1 de abril de 2020

Paseo por la calle los Labradores de Alcañices


Paseo virtual por la calle de los Labradores de Alcañices en los primeros años cincuenta del siglo XX 
Con Jesús Barros Martín


La calle de los labradores, como su nombre nos hace sospechar, era donde vivían la mayoría de las familias que se dedicaban a la labranza, aunque gran parte de ellos también habitaban otras calles  como la  Bomba, los Pájaros, o Dentro la Villa.  Actualmente  es más larga que en los tiempos en los que mi familia vivía  allí;  empezaba en el Canto del Hospital y, como ahora, finalizaba en la Peña de Santa Catalina. Por allí se movía el ganado, las gallinas y los carros de labranza propiedad de sus vecinos pero realmente los dueños de ella éramos los  niños, aunque también dejábamos que los mayores hicieran sus tertulias. Tenía dos partes muy diferenciadas: una plana, con aceras de granito y  empedrada y otra, la que está en cuesta pronunciada, que estaba de tierra y no tenía aceras.

La casa que abría la calle por la derecha,  esquina  con la del Cuesto, era la del señor Blas que vivía con su sobrino Pepe. Blas tenía una enfermedad  congénita que hacía que sus piernas estuvieran  totalmente inutilizadas.  No  solo no le sostenían de pié sino que parecían de trapo, oscilaban como colgajos. En los días de sol Pepe lo bajaba acuestas, vivían en el primer piso, para una mesa que previamente había colocado en el exterior de la casa. Como  era  buen conversador y gran contador de historias, a su alrededor se juntaban los mozos del barrio a escuchar sus charlas. A principio de los años 50  Blas y Pepe se fueron a vivir a Zamora y  en la casa vivieron posteriormente: Paco Aguiar y Arsenia,  Manuel (La) y la Srª María, D. Federico, maestro nacional, D. Marcelino, coadjutor de la parroquia, que daba unos coscorrones de los que todavía me acuerdo, un teniente de la Guardia civil y Agustín Campos con su familia. Recientemente han construido un gran edificio en el que vive, entre otros, Nieves, dueña del bar Enigma.

Las dos siguientes casas por la misma acera, eran pequeñas y ahora forman parte de la anterior. En la primera  vivía (estos son mis recuerdos) la Srª Consuelo (la Churufa),  viuda de Honorio el Portugués, electricista que trabajaba como tal en la empresa que distribuía la electricidad por los pueblos alistanos.  Falleció un día de tormenta  arreglando una avería. En esta casa vivió Manolo el de la Elisa y  Felicisima, en ella nacieron algunos de sus hijos, hasta que se fueron para Francia. Se dedicaba a la “Raya” y de eso he escrito algo en mi libro: Di tú que he sido. En la segunda casa vivió Manolo Prieto con Tarsila Huidobro. En  el portal tenía un taller de carpintería que además, como  hijo del Sr. Prudencio, sabia herrar caballerías y  alguna vez lo hacía,  aunque solo cuando  su padre no lo veía pues a este no le gustaba nada que le hiciera la competencia. Tenía el matrimonio dos hijas que junto a ellos, a principio de los 50, se fueron para Brasil y allí dejaron sus restos. Las hijas han vuelto alguna vez. La casa la compró Daniel Gago "Borreguito" pasando a vivir allí con Angelita su mujer. 

A continuación vivía un guardia civil apellidado Mostaza con su mujer Dolores. A este matrimonio, en unos carnavales, en una coplilla en l a que se relacionaban  remedios caseros les decían: Para curar los tumores/ tiene muy buena mostaza/ la señora Dolores. La vivienda, posterior y consecutivamente fue habitada por guardias, el primero, Pastor, aficionado a la caza y dueño de un bonito perro  setter llamado Trus. Estaba  destinado en las oficinas de la comandancia y no hacía servicio de calle. Casó con Pepa, hija de Jacinto García uno de los fundadores de la empresa de trasportes la Alistana. Cuando este matrimonio se fue para Zamora, residió en la casa el   formado por  Moisés,  que estaba destinado como guardia de fronteras en la aduana, y doña Amparo, maestra nacional  recordada con cariño por sus alumnas. Al matrimonio, que no tenía hijos, lo acompañaba la madre de doña Amparo. Después, y como consecuencia de dejar su vivienda en el palacio del marqués, pasó a residir en la casa su dueño, Tomás Cerezal “Pantomino” (hombre con memoria prodigiosa, por cualquier persona o hecho que le preguntaras te daba información exhaustiva, hasta si el día de autos hacía sol  o llovía y a qué hora sucedió). Hoy la casa pertenece a alguno de sus descendientes.

La siguiente casa era de la Srª María, “la Plantada” yo ya la recuerdo mayor, viuda, vestida siempre de negro con el pelo muy blanco. Tenía tres hijas, la mayor se casó con un guardia civil llamado Exuperancio y se fueron  para Zamora. La segunda fue matrona, ojo, no partera sino de las que hacían registros a mujeres, en la aduana de Alcañices y luego se integró de lo mismo en la Benemérita. Isabel, la tercera, se casó con Elías, el de "Lazarete" y, ya viuda, es quien  ahora ocupa la vivienda.
  
A continuación está la casa del Sr. Prudencio Prieto el herrador. Es una casa con apariencia, tiene una gran fachada  con balconada  de hierro forjado que la ocupa totalmente y  embellecida por una hermosa parra. El Sr. Prudencio  herraba  las caballerías de todo el pueblo, cosa que hacía con profesionalidad, personalidad y fortaleza. Tenía el yunque en la misma calle, en la  fachada noroeste de la Alhóndiga. Era, aunque bajo, fuerte, de brazos poderosos y blasfemo de blasfemias ateas. ¡Ay del burro o caballo que le diera problemas!, le ponía el acial de hierro en el belfo, lo cogía con la izquierda y con el martillo en la derecha le daba en el lomo tales martillazos   que no se volvía a mover ni aunque le clavara en las partes blandas del casco. No se llevaba bien con su hijo Manolo que, como dije antes, vivía tres casas más arriba y que también era, además de carpintero, buen herrador. Los clientes cuando llevaban las caballerías a herrar y no veían al Sr. Prudencio hacían sonar el yunque dándole con el martillo y, si pasado un tiempo este no aparecía, señal de que no estaba en casa,  salía Manolo  y lo suplantaba. A veces, cuando llegaba Prudencio y  veía a su hijo herrando, le organizaba una de siete toros. Salía la vecindad a ver la bronca y ya había tema para toda la semana. Prudencio era padre de Domingo el “Eje” que fue durante algún tiempo cartero en bicicleta  de Sejas, Latedo, Trabazos y San Martín del Pedroso,  en la casa vive una de sus descendientes.

 La  lindante con la anterior es la de la familia de Bernardo Barros, “Cacharros”, labrador y aficionado a la carpintería,  casado con Juliana Gago de la familia de los “Religiosos”. La casa tenía y tiene la fachada estrecha comparada con las que están a su lado, pero era larguísima,  la parte de atrás salía al Cuesto donde había enormes corrales, cuadras y un gran huerto. El matrimonio tenía cuatro hijas y tres hijos. Uno de ellos, Bernardo, muy hábil para hacer pequeños juguetes de madera, murió teniendo alrededor de 15 años suceso que impresionó a todo el barrio ya que era muy joven y fuerte como un roble.  En la casa continúa viviendo Miguel “Manzanilla” también, como su padre, aficionado a la carpintería.

En la siguiente  residía Paulitos,  carcelero y después cartero. A continuación  ocupó la casa Felipe Figueroa que vino de la localidad de El Poyo de donde era su primera mujer y donde residió después de las vicisitudes que le tocó vivir por el hecho de ser concejal del ayuntamiento de Alcañices en Julio de 1936. Tenía enormes conocimientos de geografía, gramática y matemáticas, entre otras materias y fundó una especie de academia en la que impartía conocimientos  a chicos que por trabajo no podían  asistir a la escuela pública. Después habitó la casa Manuel Gago “Rolacho” que vino desde Arcillera, donde vivió algunos años por su matrimonio con María Martín, de aquella localidad. En la actualidad la casa pertenece a un hijo de Manuel y está deshabitada.
 Después había un enorme corralón que era propiedad del señor Tomás Gago “El Religioso” que lo utilizaba como cuadra y para guardar los aperos de labranza.

La vivienda siguiente pertenecía a Francisco García “Paco el Polla” quien formaba parte de  una extensa familia de zapateros dispersada por varios pueblos de la comarca alistana. Tenía el matrimonio familia numerosa, creo que eran siete los hijos e hijas, cosa muy frecuente el aquellos tiempos. De Paco conté en mi libro Di tú que he sido una anécdota que voy a repetir aquí: era asiduo del bar que Bernardo Rodríguez tenía en la calle del Hospital, donde instalaron la primera televisión que hubo en el pueblo,  en el que se jugaban a las cartas el café los asistentes. El dinero, como siempre, era más bien escaso, por tanto  importaba mucho ganar y sabido es que las partidas se ganan o se pierden dependiendo de si  los contrarios son   buenos o malos jugadores. Llegado Paco al bar le invitó a jugar una partida uno de los asistentes, previsor, Paco preguntó por quiénes eran los contrincantes, cuando se lo dijeron Paco contestó: no, hoy no juego, voy a ver la ópera. Era miércoles y ese día en la TV retransmitían una ópera. Paco, como fácilmente se puede sospechar, no era especialmente aficionado a ese género musical pero sí le sirvió de buena excusa para no tener que pagar el  café al antagonista de turno. Hoy la casa pertenece a su hija Pura  quien, en compañía de su marido, la habita gran parte del año.

Aledaña a la casa anterior estaba la de Antonio Ramos, “Poronilo” que estaba casado con una Cañedo. Este matrimonio estaba considerado como el más trabajador de la calle. La familia la formaban el matrimonio, un hijo y cuatro niñas. Antonio falleció joven siendo los hijos pequeños. La  madre asumió la responsabilidad  y  hijo  e hijas arrimaron el hombro colaborando todos al bienestar de la familia. La casa ahora sigue perteneciendo a una de las descendientes que continua viviendo en ella.

La vivienda contigua pertenecía al Sr. Cándido Carrión y a su esposa Sofía que eran padres de una hija y tres hijos. La casa era la tradicional de una familia labradora, se entraba por un corral donde se guardaban el carro y los aperos de labranza estando al fondo la cuadra para vacas, cerdos y gallinas. Excepto Tomás, cartero de Santa Ana,  Villarino Tras la Sierra y San Mamez, todos los demás miembros de la familia se marcharon para no volver. Cándido y Sofía, ya mayores, se fueron con la hija para Rionegro del Puente, esta, casada con Eusebio Rodríguez, hijo de Domingo “el Rojo” quien siguiendo la tradición de las familias de zapateros que consistia en que una vez casados, para independizarse, se establecíeran  en localidad distinta a la de procedencia, se fue para allí. La casa fue adquirida por una hija de la familia de Antonio Ramos que la remodeló y en ella vive.

Inmediatamente después hay una estrecha calleja que daba paso al domicilio de Juan Antonio Ramos. La casa estaba condicionada por  la calleja que no tenía espacio para un acceso con vehículos. Regentaban una pescadería y llevaban pescado a los pueblos vecinos. Ese mismo negocio lo trasladaron al soportal de la casa de Dacosta en la la calle de la Herradura y después a la del Hospital donde adquirieron parte de la Alhóndiga que allí existió  durante tres siglos. Este señor era miembro del ayuntamiento que “desaparecieron”  en julio de 1936. La familia la formaban: el matrimonio, el hijo Antonio, y tres hijas llamadas Salud, Socorro y Caridad.

A continuación había un corral y seguidamente una amplia calleja  que me parece que no tenía ni tiene nombre. En ella había tres domicilios, el de Isidoro Ramos que estaba casado con  Dolores, que procedía de Alcorcillo. Isidoro falleció habiendo cumplido 105 años, siendo hasta la actualidad el más longevo de la Villa. El matrimonio no tuvo hijos y hoy la casa pertenece a uno de sus familiares.

En frente del anterior vivía   Alejandro López  y su mujer Agustina Rivas. Él era churrero y los churros que hacía los vendían por las calles sus hijos Alejandro y Angelito. Luego trasladaron  el  negocio a la plaza del convento, en el local que hoy ocupa la cooperativa de  lechal.  Posteriormente Alejandro se fue para Madrid y Ángel abrió el bar Avenida en la calle San Francisco. La casa  sigue perteneciendo a la familia.

 Adosada a la anterior estaba la hojalatería del Sr. Clemente. Para entrar en la casa, al igual que en la anterior, había que subir escalones debido a la inclinación de la calle. En el oscuro portal de entrada, al fondo, estaba el taller: fragua, yunque y herramientas propias del oficio. La tienda te la encontrabas nada más franquear la puerta de la calle. A la derecha había un pequeño mostrador atestado de pequeñas cosas ya hechas o a medio hacer  Del  techo  colgaba una amalgama de faroles, candiles cubos, regadores y/o cualquier utensilio  factible de hacer en hojalata. Y en las paredes estanterías llenas  de objetos ya confeccionados a la espera de  que fueran retirados por quienes los habían encargado. Clemente vivía con su pareja, Rogelia, asturiana criada en Argentina, país al que emigraron los dos hijos del matrimonio. Pepe, el pequeño, fue el segundo en irse y lo hizo comprometido en matrimonio con Isabel, hija de Bernardo Barros. El matrimonio lo hicieron por poderes y en la ceremonia representó al novio Manuel, Hermano de la novia y Francisco Anta “Patito”, su cuñado, que hizo de padrino. La boda se celebró en la parroquia y dada su rareza fue observada por muchos curiosos. Inmediatamente Isabel  partió para donde estaba Pepe embarcando en el puerto de Vigo.
Antes dije que Clemente vivía con su pareja, cosa que puede sonar rara y más en aquellos tiempos. Aclaremos el asusto. Clemente y su mujer, ya mayores, reclamados por sus hijos, decidieron irse para la Argentina. Empezaron a tramitar la documentación requerida y se toparon con que no existían papeles que acreditaran su matrimonio. Es posible que se hubieran  casado en Cuba.  Aquello fue una sorpresa enorme para ellos, estaban seguros de haberlo efectuado pero legalmente vivían en pecado. Felizmente las autoridades civiles y eclesiásticas le facilitaron los trámites y formalizaron sin problemas la situación para poder acceder a aquel país.
La casa creo que pertenece en la actualidad a Ángel López Rivas.

Hoy el paseo se ha hecho demasiado largo y no quiero  la Guardia Civil me coja incumpliendo la obligada confinación en mi domicilio. Si el coronavirus me deja otro día seguiré por esta calle en la que me nacieron, jugué de niño y habité durante mucho tiempo.
Saludos
Jesús.

sábado, 7 de marzo de 2020

Alcañices en el Catastro del Marqués de la Ensenada

Catastro del Marqués de la Ensenada

Libro de Respuestas Generales

Zenón de Somodevilla y Bengoechea, primer marqués de la Ensenada, ordenó hacer un catastro en toda España para regular los tributos a la Hacienda Pública. En Alcañices se hizo en abril de 1752. Como,  en mi opinión, creo que es interesante  para conocer cómo era la Villa reproduzco aquí algunas de las preguntas del cuestionario y las correspondientes respuestas.

Interrogatorio a que han de satisfacer, bajo de Juramento, las Justicias, y demás personas, que harán comparecer los Intendentes en cada pueblo.
En Alcañices a diezyocho días del mes de Abril de mil setecientos y cincuenta y dos, estando presentes ante dicho señor Juez subdelegado, D. Balthasar Albarez, Rexidor decano y Teniente de Alcalde mayor por ausencia de D. Isidoro de las Doblas; D. Francisco Javier Gago, y D. Jerónimo Gago, rexidores perpetuos; Diego Pérez, procurador síndico general; José Gago y José Frayle, alcaldes pedáneos; Domingo Turiel y Antonio Fernández Arguello, por ausencia de Diego Casado sus asociados; Gaspar de Rivas perito nombrado por dicho Sr. Juez, y Pedro Estevan  agrimensor, con asistencia de D. Domingo Martín cura párroco de esta dicha villa, haviendoseles lehido por mi el escrivano las cuarenta preguntas de dicho interrogatorio, quedando todos vien instruidos, y reiterado el juramento, las prometieron satisfacer y satisfacieron en la forma siguiente:
1.     Como se llama la población.

Dixeron que esta villa se llama Alcañices.
2.     Si es de Realengo, ú de Señorío: á quién pertenece: qué derechos perciben, y cuanto producen.

Que es de Señorio perteneciente del Estado del Excmo. Marques de Alcañices, que como tal percive de sus vecinos doscientos reales de vellón por razón de herbaje.
Asi mismo percive de sus vecinos la quarta parte del producto que resulta de los abastos de esta dicha villa, que ascienden  en cada año a lo siguiente:
         Por abasto de la  carne le corresponden…………………….252,25
         Por el de la taverna……………………………………………1693,25
         Por el de la Abazeria…………………………………………   176
         Por los cientos, Alcavala forana, Peso mayor y Portazgo.. 634
3.     Qué territorio ocupa el Término, quanto de Levante a Poniente, y del Norte al Sur: y quanto de circunferencia, por horas y leguas: que linderos, o confrontaciones y que figura tiene, poniéndola al margen.





Que ocupa el término de esta villa de levante a poniente media legua, del mediodía al norte tres quartos de legua, y de circunferencia dos leguas y media, confronta a levante con el término del lugar de Vivinera. A poniente con el de Alcorcillo, a mediodia con el de San Martin de las Zevollas, Reyno de Portugal, y al norte con el de Matellanes, su figura la que sigue

       15. Que derechos se hallan impuestos sobre las tierras del término,   
     como diezmo, primicia, tercio-diezmo, ú otros y a quien pertenecen.

Que del fruto que se coje, se paga el diezmo; la primicia se  cobra de cada especie de granos media fanega en llegando a diez de cosecha; y esta pertenece a la favrica de la Yglesia de esta villa y el dicho diezmo, se reparte entre el cura párroco y el señor Marqués sin haver mas tercio.
El Boto de Santiago tamvién tiene media fanega solo de zenteno en llegando a diez la cosecha.
(El Voto de Santiago, fue creado por Ramiro I para dar gracias al apóstol por la victoria contra los moros en la batalla de Clavijo, 23-5-844, que  liberó al reino de Asturias del tributo de Las Cien Doncellas que pagaba al emirato de Córdoba y tuvo vigor hasta las cortes de Cadiz)

       17. Si hay algunas minas, salinas, molinos harineros, ú de papel, batanes, ú otros artefactos en el término, distinguiendo de qué metales, y de que uso, explicando sus dueños, y lo que se regula produce cada uno de utilidad al año.

      Que ay veinte y dos molinos arineros, y un pisón, que muelen con agua                     corriente, que sus dueños, los meses que muelen en el año, y el producto en reales de vellón es como sigue:
 Relacionan y detallan quien es el dueño de cada molino, cuantos meses muelen al año cada uno y cuantos reales de vellón  producen. Todos producen un total de 4.736. R. v.
     Asi mismo dos molinos arruinados, el uno por imposibilidad de los herederos de Antonio Fernandez y interesados; y el otro por abandono de Jose Fernandez.  

     19. Si hay colmenas en el término, quantas y a quien pertenecen.

     Que hay ciento y noventa y cinco colmenas, que sus dueños y el producto anual de cada una a razón de quatro reales, es como sigue:
                                        
                                           Colmenas     Rs. De Von

  Domingo Turiel                         14               56
  Mateo Fernandez                       24               96
  Francisco Javier Gago                5               20
  Victoria Fernandez                    35             140
 Jose Zerezal                                4               16
 Manuel Rodriguez                       1                 4
Francisco Macho                        27             108
Alonso Gonzalez Losada             16               64
Ambrosio de la Peña                   55             220
D. Domingo Martin                    14               56
                                              -------        ---------
                   Total……………….195             780

    20. De que especies de ganado hay en el pueblo, y termino, excluyendo las mulas de coche, y cavallos de regalo; y si algún vecino tiene cabaña, o yeguada, que pasta fuera del termino, donde, y de que numero de cabezas, explicando el nombre del dueño.

         Que hay quarenta  y cinco pares de labranza, en treinta y seis bueyes y cincuenta y quatro bacas. Sesenta y dos cabezas de bravío en ocho bacas,
quarenta y tres novillos y treinta y una novillas, y trece terneros; y es regular que las bacas asi de labranza, como bravías produzcan al segundo  año una cria.( En el ganado bravío hay un error de 33 cabezas)
          Sesenta y tres yeguas y quatro potras, que el producto de cada una regulan bale anualmente ciento y quince reales de vellón.
           Cinco mulas y un macho de cria; cinco caballos y un potro; dos mulas, dos machos, y dos yeguas de carga. Treinta y cuatro pollinos y dos pollinas con dos crias.
Doscientos ochenta y seis zerdos; los quarenta y dos de ceba, y los doscientos y cuarenta y quatro camperos.
NOTA: Que también ay un puesto a cargo de Juan Pedrero, vecino de esta villa, para cuyo efecto mantiene cinco grañones, y a dos caballos, y le deja por maior, según la consideración que se le hace, quatro mil y doscientos reales de vellón al año.
No hay cabaña, ni yeguada fuera del termino.

        21. De que numero de vecinos se compone la población, y cuantos en las casas de campo, ú  alquerías.

         Que hay ciento y veintiocho vecinos y medio, y veinte residentes; y entre dichos vecinos ba incluso uno que vive en una casa de campo.

        22. Quantas casas havra en el pueblo, que numero de inhabitables,
 quantas arruinadas; y si es de señorio, explicar si tienen cada una alguna carga, que pague al dueño, por el establecimiento del suelo y cuanto.

Que hay ciento y setenta y una casa avitadas, y dos arruinadas por imposibilidad de D. Miguel Gutiérrez, y Ambrosio de la Peña, sus dueños; y una casa de campo dentro del termino.

         25. Que gastos debe satisfacer el común, como salario de Justicia, y de que deberá pedir relación autentica.

         Que importan los gastos del común cinco mil quinientos y treinta y tres reales de vellón, que se distribuyen según consta de la relación testimoniada que se presta y acompaña:
La relación es minuciosa detallada y larga. Doy solo alguno de los conceptos en los que se gasta el presupuesto

        De la fiesta que se hace a San Roque como Patrón,
        Novillos y toro de muerte, comedias, sermones danzas
       Y fuegos………………………………………………………..1.788
       Misas, y funciones religiosas……………………………….   259
        Parroco,y tres presbíteros…………………………………...  340
        Vino ……………………………………………………………  407.
Algún concepto lo agrupo. La relación sigue hasta el total de 5.533 reales.
La fiesta de la virgen de la Salud no se menciona.

        26. Que cargos de Justicia tiene el Comun, como censos, que responda, ú otros, su importe, por que motivo, y á quien, de que se deberá pedir puntual noticia.

         Que tiene el Comun contra si y a favor del Hospital de San Nicolas de esta Villa, un censo alquitar de un mil y ciento reales de vellón del principal y treinta y tres de réditos, que tomo el año de mil y setecientos y quarenta y siete para pagar parte del coste que tubo la echura del reloj de esta referida Villa y composizión de la torre de él.

Este punto nos dice la fecha en la que, sobre un cubo de la muralla, se levantó la torre y pusieron el  primer reloj. Pienso que deja clara también otra cosa que se desprende de  hacia dónde pusieron la esfera: que ya era más importante el “Arrabal”, como denominaban al barrio extramuros que creció hacia el convento de San Francisco, que el de Dentro la Villa.
Esto es solo una opinión mía, si hay alguien que tenga otra información  me gustaría que la expusiera. Ganaríamos todos.

      30. Si hay Hospitales, de que calidad, qué renta tienen y de que se mantienen.

             Que hay un hospital intitulado San Nicolas, que sirve para pobres enfermos, junto a una Alondiga, que fundaron los Exmos. Srs. Don Francisco Henriquez de Almansa y Doña Ysabel de Ulloa su mujer, Marqueses que fueron de esta villa y estado, en el año de mil y quinientos y cuarenta y uno, quienes le dejaron de situado en cada uno y en ella para de su subsistencia cincuenta cargas de trigo y seiscientos y nueve reales y seis maravedises, que le da dicho estado; con mas quatrocientos y quarenta y tres reales y veinte y quatro mrs. que los referidos señores le cedieron en los Juros sobre las Alcavalas de las ciudades de Zamora y Toro.
NOTA. Se previene que además de lo de arriva expresado, se halla oy dicha Alondiga con el aumento de 428 fanegas de trigo, y 2.294 reales de v. (liquido uno y otro, después de rebajados gastos) que cobra de réditos creces que han dado los labradores a quienes ha sido costumbre repartirles dicho trigo para remediar sus nezesidades con la obligación de reponerlo en la expresada panera (como hasta aquí se há hecho) dando por ellas dos celemines en carga; y de haver estado el referido Hospital zerrado en su  uso alguno durante el tiempo que padecio esta Villa y tierra la imbasión de los enemigos,(guerra de sucesión) y despues de ella, algunos años mas.

       32. Si en el pueblo hay algún tendero de paños, ropas de oro, plata, y seda, lienzos y especiería, ú otras mercadurías, médicos, cirujanos, boticarios, escrivanos, arrieros, &c. y que ganancia se regula puede tener cada uno al año.

No detallo todos los que vienen en la respuesta, que hacen con nombre apellido profesión y los ingresos que tiene cada uno pero reflejo el número
  EL CORREXIDOR, Isidoro de las Doblas 4.522 R. v. y los que menos tres REXIDORES que cobra cada una 32 R.v. hay 4 ESCRIBANOS, 1 ALCAYDE DE LA FORTALEZA. 4 ESCRIBANOS.
 3 PROCURADORES DE CAUSAS, 4 MINISTROS DE AUDIENCIA,
1 VICARIO GENERAL, 1 NOTARIO, 1 ADMOR. Y TESORERO DEL ESTADO que percibe 4.929 R.v.  1. ADMOR DE ADUANAS Y TABACO, 5 MINISTROS DE RENTAS GENERALES, 1 ADMOR. DEL HOSPITAL, 1 MEDIDOR DE GRANOS, 1 ADMOR DE LA SAL, 3  DE ESPEZIERIA, 1 BOTICARIO, 1 MEDICO, 1 BARBERO (que gana mas que el médico), 48 TEJEDORES DE LIENZO, 2 TEXEDORES DE PAÑO, 2 HERREROS, 1 CARTERO, 1 MANPOSTEO, 1 ESCULTOR,
 2 CARPINTEROS, 1 TABERNERO, 8 SASTRES, 1 PERAIRE (cardador de paños). 1 CORTADOR.

      35.Que numero de jornaleros havrá en el pueblo, y a que se paga el jornal diario de cada uno.

      Que ay en esta villa treinta y cinco labradores, cuio jornal diario de cada uno es de quatro R. de Von. Dos jornaleros a tres; seis pastores a dos; quatro criados de servicio a dos; un criado para el puesto otros dos.
Que hay ocho pobres de solemnidad con siete hijos, y ban comprendidos en el vecindario.

   38. Quantos clérigos hay en el pueblo.

       Que hay: el Cura Párroco, Suteniente, dos clérigos presviteros, el uno presidente, un clérigo de mayores, y el Vicario General de Alba y Aliste.
.
   Que hay un convento de Observantes, orden de Nuestro Padre San Francisco, con doce frailes de Misa, un lego y dos donados.

     Y para que conste ser lo arriva relacionado conforme y arreglado a toda verdad y formalidad, lo firmaron los que supieron, y yo el escrivano, que de todo ello doy fé.
    

      En 1871 se realiza un censo de población en el que se detallan con nombres, apellidos, edad y profesión  todos los habitantes de Alcañices, en el que figuran 272 vecinos,  1.060 almas. En la relación de profesiones detallan 6 mujeres que viven juntas y figuran con la de “su sexo”. ¿Cuál sería?

A Alberto Pérez,  compañero en la redacción del Renacimiento, in memoriam
Jesús Barros Martín.

sábado, 22 de febrero de 2020

Costumbres comunales de Alcañices (3)


Usos comunales de Alcañices (3)

Los ayuntamientos asumían, independientemente de su capacidad económica, (el de Alcañices nunca estaba boyante) competencias en cuestiones que hoy las ejercen otras instituciones. Estaban, entre otras, enseñanza y sanidad. Así:

En los meses de marzo y abril del año 1838, en varias sesiones de la junta municipal se acuerda hacer visitas a la escuela para inspeccionar la enseñanza que se imparte. Incluso se instruye un expediente al maestro de primeras letras ¨Por ausentarse sin permiso y no dejar a cargo de la escuela a un sustituto”.
 En la sesión del ayuntamiento del 17 de marzo de 1839, la junta municipal acuerda aumentar a 2.600 pesetas la dotación de 200 ducados que tenía Don Manuel Panero,  maestro de primera educación de la villa.

En sesión plenaria del 11 de abril de 1843 los miembros del ayuntamiento hacen constancia del conocimiento que tienen de que “el médico de la villa está haciendo diligencias para irse sin conocimiento del ayuntamiento y acuerdan despedirle”.
En relación con lo anterior, el 11 de julio de 1844 en  sesión ordinaria, el ayuntamiento acuerda consultar a un abogado ya que “el médico reclama que se le abonen sus honorarios hasta el 15 de noviembre de 1843”.

El 13 de julio de 1847 el ayuntamiento cede el hospital para que  atiendan allí a los soldados enfermos. Creo que en algún otro sitio he dejado dicho que en hospital existía un cementerio en el que se inhumaban a quienes fallecían en él,  transeúntes y soldados, y no fueran reclamados por familiares.
El 12 de junio de 1847 el ayuntamiento contesta a la solicitud del comandante del regimiento que estaba aposentado en la villa: Que le es imposible proporcionar la cebada y la hierba que le pide para los caballos de los soldados.

También el 30 de junio de 1847 hay un escrito en los términos: “Habiendo pasado oficio el Sr. Comandante de Armas de esta villa para que las compañías destacadas en este punto sean desde hoy acuarteladas en el edificio palacio que en esta villa tiene el Ilmo. Sr. Marqués, por ser el punto más ventajoso y cómodo para el soldado, pásese el correspondiente aviso amistoso a la Administradora del Marqués para que entregue las llaves del referido edificio y, caso de que se resista, se  autoriza al Sr. Alcalde a que la obligue a efectuarlo con todo rigor”.
En toda esta trayectoria se ve que nunca han sido cordiales las relaciones entre el ayuntamiento y la administración del marquesado.

En 1848 en la  comarca hay una terrible epidemia en el ganado. El ayuntamiento  toma medidas para evitar en lo posible que se extienda. El 31 de agosto indica: “Que para evitar el contagio de ganados y personas recomienda, que para enterrar a las reses de ganado vacuno que hayan muerto, se hagan los hoyos profundos”.

 El 6 de septiembre “Se prohíbe la venta de carne de ganado vacuno muerto y que el enfermo se tenga en las cuadras y no se saque a la calle para evitar el contagio, bajo multa de 8 ducados. Y que el día de mañana se hagan rogativas al Todo Poderoso”.
Después de estas epidemias que sufrió el ganado vacuno, es normal que en los años siguientes este escaseara. Por tanto, para volver a la situación anterior a la  que había anteriormente el ayuntamiento en sesión de 13 de agosto de 1849 dice “Se ordena al abastecedor que deje de matar ganado vacuno y maté solamente machos cabríos y carneros, bajo multa de 100 ducados y de perder la carne”.
El 11 de febrero de 1858, se nombra la Junta de sanidad.

El 16 de febrero de 1840 el ayuntamiento recomienda a los vecinos: Que en los corrales particulares no se alberguen más de cinco burros de viajantes y forasteros, y estos que sean amigos, o que saquen la oportuna licencia municipal, para no perjudicar al arrendatario del mesón”.

Como ya apunté más arriba, muchos son los temas de los que tienen que ocuparse el ayuntamiento. Así que a continuación relaciono algunos:

En aquellos tiempos se hacía porcada, esto es, que los cerdos que tenían los vecinos de la villa salían a pastar a valles y montes comunales, unas veces cuidados por un porquero contratado para ello y otras a cargo de los propietarios. 

El 31 de enero de 1841 hay una sesión dedicada a dar normas sobre cómo deben ir los cerdos a los valles. “Tienen que ir argollados para no causar destrozos en las praderas y a cargo de un cuidador que sea pagado por los dueños de los cerdos proporcionalmente al número ellos que tengan”
(La argolla era, es, un alambre que se pone en el hocico de los cerdos para que al hozar en la tierra se hagan daño y no puedan hacer agujeros en las praderas).
 Parece  que algunos no cumplían  con la norma y el 23 de marzo de 1842 recuerda a los vecinos que “Los cerdos no vayan a los pastos sin argollas”
El 22 de enero de 1871 el ayuntamiento decide “adquirir un cerdo padre para el servicio de las cerdas de los vecinos”.
El 1º de mayo en Alcañices una feria anual de ganado. El ayuntamiento estaba advertido de que el ganado: vacas, cabras, ovejas y caballerías,  procedentes de Portugal, causaban gran daño en los sembrados. Como consecuencia acuerda “Que el pregonero de un bando en ese día, 1841, para advertir a los portugueses de que se les cobrará el daño que causen y que se les impondrán multas”.

Se  desprende que existían unas relaciones, de amistad,  parentesco y comerciales fluidas entre  Tras-os-Montes y Aliste, que venía de antiguo y  que estaban respaldadas por normas consuetudinarias. He encontrado una carta fechada el 25 de marzo de 1764 dirigida por el alcalde de Alcañices al gobernador civil de Zamora, siento no acordarme dónde aunque creo que fue en el archivo provincial, que dice:
             “Siempre fue costumbre que los ganados de Portugal entraran una legua dentro del territorio español a pastar y viceversa, pero como ahora la Ronda Montada de Sayago encontró 175 cabezas de ganado caprino, pastoreadas por Manuel Pires, de Cicuero, y las aprehendió, pide por eso, en nombre de la villa de Alcañices, que sean restituidas a dicho vecino de Cicuero, para mantener la buena armonía que entre los pueblos de una y otra nación siempre ha habido”.
El 20 de febrero de 1842, se ordena que se advierta a los transeúntes de Mellanes y de Arcillera que traigan caballerías y/o ganado, que no causen daño a los sembrados bajo multa de 1 ducado.

El 19 de junio de 1844 hay acuerdo a fin de “Que le pongan cencerros a los bueyes para saber donde se encuentran, vigilar los sembrados y ver qué dirección llevan”.

En un comunicado del ayuntamiento del 9 de julio de 1858 le dicen al gobernador civil “Que los ganados que fueron aprehendidos por la Guardia Civil no son de contrabando, si no que no se le ven bien las marcas porque cuando procedieron  a marcar el ganado de la zona, lo hicieron con precipitación y al poco tiempo no se le conoce la marca”

 Todos los años en el mes de marzo el ayuntamiento convocaba solo a los agricultores  para el acondicionamiento de los caminos. Excepcionalmente el 3 de marzo de 1850, por razón del uso, “Se hace saber al vecindario que el día 7 esté en la plaza una persona capaz de cada casa con carro, arado, pico o pala para proceder a arreglar el CAMINO DE ZAMORA, bajo multa de 4 ducados”
Durante la primera semana de junio a las 4 de la tarde, a toque de reloj, se cita a los dueños de fincas de los pagos que citan, para limpiar y poner  las regaderas, acequias, en condiciones para el riego. La forma de regar era: a agua tirada.
Las regaderas que se acondicionaban y el orden en que se hacían era: la Ganada, la Perdida, el Tejar, la Riberica, la Linarada y el Jardín, el Prado Gaspar, el Ramilo y el Carpazal.
La asistencia era obligatoria para todos los propietarios que tenían huertos en esos pagos.
Todos los años se nombra veedor repartidor para controlar el agua de la Ganada
Aunque  los ganaderos conocían las fechas, el ayuntamiento ordenaba al alguacil que pregonara el acotado y desacotado de los valles de Palazuelo, Sahú, Monte del Marqués y Bozas. También, cuando procedía,  el aprovechamiento de bellotas.
El  aprovechamiento de la rastrojera  estaba regulado. Hasta que no se había acabado el acarreo de las mieses no empezaba. Primero se hacia el respigueo, que casi siempre lo efectuaban las mujeres. Después era el ganado vacuno el que tenía permitido  el acceso, el ovino y caprino eran los últimos que pastaban.
El tiempo de empezar la segada era regulado por el ayuntamiento. Con la mies  segada se hacían manojos que se juntaban en Morenas o Mornales,  así se denominaban los montones que con ellos se hacían, para facilitar el acarreo cuando se pillaba la raposa, como se decía cuando se acababa la segada. Luego se llevaban a la era donde se colocaban en Medas. Parva, trilla, limpia y grano a la panera. Ese día era una fiesta y en el horcón, que se ponía en el sitio de un picón del carro que llevaba los costales, se colgaba un gallo. Corría  el vino y, por supuesto, había los consiguientes cánticos tradicionales.

Entre 1841 y 1870 hay acuerdos concediendo robles y pinos para que puedan construir sus casas algunos vecinos que lo solicitaron.

El 18 de abril de 1843 “Se les concede la vecindad. Según la solicitud que presentan, a Manuel Rodríguez (Fernandais) y a Santiago Juan.
El 4 de febrero de 1845 también se les concede la vecindad en la villa a “los solicitantes: Domingo López y Pedro García, el 1º de vecindad portuguesa, pero lleva 8 años en Alcañices y el segundo casado con una hija del pueblo.

El 8 de octubre de 1848, se fundió la campana pequeña de la parroquia.

El 12 de agosto de 1853 el ayuntamiento acuerda “Que a vista de la excitación de algunos vecinos para que se verifique una corrida de toros en esta villa para solemnizar a su patrono San Roque, teniendo en cuenta el poco adelanto que tiene que hacer de los fondos comunes,  este ayuntamiento accede a ello”.

“El 9 de octubre de 1870 acuerdan agente y o representante del municipio en Madrid a Don Joaquín Gómez, a quien se dan y confieren todo su poder bastante y tan amplio como le sea necesario para que pueda representarle en el curso de todo género de negocios que el municipio pueda entablar y reclamaciones que tuviere que hacer”.
El 8 de enero de 1843 publica convocatoria para cubrir la vacante de Alcayde de la cárcel “Los solicitantes deben acreditar buena conducta moral y política y en igual circunstancia será preferido el que haya servido a la patria con buena licencia, sea mayor de 34 años y menor de 58”.
El 24 de marzo Alcayde a Juan Rodríguez.

El 27 de febrero de 1870 acuerdan “Que en tiempo de carnaval como en todas las épocas del año, quedan prohibidas las reuniones y bailes a horas intempestivas, así como también los juegos en los establecimientos públicos después del toque de queda bajo multa de 1 a 10 escudos.
En este orden de cosas ya el 28 de mayo de 1848 el ayuntamiento manifiesta “Que debido a los altercados que algunas veces llegan a las manos, se ordena que se suspendan después de las 10 de la noche las rondas de mozos”.

Estas son algunas de las cosas que pasaban en la Villa en tiempos de la segunda mitad del siglo XIX. Esta entrega ha salido un poco larga pero espero que le resulte interesante a quienes tengan curiosidad.
Si soy capaz, lo siguiente que publicaré será un resumen, ponerlo literal creo que sería pesado, del Libro del libro Respuestas Generales del Catastro de Marque de la Ensenada.

viernes, 14 de febrero de 2020

2ª entrega de usos comunales


Usos comunales de Alcañices (2)

Otra de las constantes preocupaciones del consistorio es lo concerniente a abastos para la localidad, tanto por las contribuciones que percibe como por la calidad de los servicios que se prestan. Como el ayuntamiento está siempre a dos velas hay muchos acuerdos concernientes al cobro de arbitrios.

En 12 de mayo de 1839, se  hace referencia a que “los arrendatarios  que deben pagar los arbitrios efectúen los pagos rápidamente para poder atender a la contribución de guerra. Que se haga saber a los de abastos, alcabala, taberna, casa mesón y fielato (estos arrendamientos salen a subasta anualmente) que solo una tercera parte la paguen en vellón y los otros 2/3 en oro o plata”.
El 28 de marzo de 1841 el consistorio se hace eco de las quejas de los vecinos en relación a la calidad de los productos que se venden en los abastos, y propone medidas para que sea mejorada esa calidad. ¿Qué proponen?: “multas que se duplicaran si se repiten los hechos”.
También el ayuntamiento protege a los arrendatarios de estos servicios; así, en  sesión celebrada el 11 de abril de 1841, acordaron: Que siendo mañana y pasado los días en que, según costumbre, los vecinos celebran la Pascua saliendo al valle donde se hallan los sembrados, se les haga saber en evitación de perjuicios que no pueden llevar a Valdesejas ninguna caballería, bajo la multa de un ducado a quien lo hiciere, y que solo las dos del tabernero que conducen el vino pueden consentirse. Haciéndolo presente por medio de la voz pública para conocimiento de todos los habitantes de esta villa. Y lo firman conmigo: Gago, Fagundez, Fraile y Mezquita. Que certifico.
El 1 de enero de 1843 se ordena: Que, según costumbre, se proceda a la entrega de medidas, pesas y demás alhajas propios de esta villa a los abastecedores, reconociéndolas antes por si se hallan deterioradas.
20 de noviembre de 1846: Habiéndose denunciado a la Corporación por algunos vecinos de la mala calidad del vino que se vende en el puesto público por el arrendatario. A   fin  de averiguar lo  que en el particular  haya, se nombran como peritos inteligentes a D. José Martínez y a D. José Rodríguez (digo yo que serían expertos en el tema) de esta vecindad, a quienes se les hará saber por el alguacil de que cumplan con religiosidad (será porque con vino se consagra) este encargo para que en vista de lo que adviertan, acordar lo conveniente en beneficio del vecindario. Así lo dijeron y firmaron los que saben. De que certifico.
 
El 26 de abril de 1849 se dice: A los que se dediquen a la venta de vino al por mayor que tienen la obligación de descargarlo en la casa taberna o en el fielato para su intervención. Los  vecinos que tengan vino a la venta lo llevaran a la taberna o fielato para su depósito en el plazo de este día, bajo la pena de decomiso y demás a que haya lugar.

Inventario que el ayuntamiento hace el 1 de  enero de 1855 de los pesos, medidas y utensilios existentes en las dependencias municipales:

En la taberna.- Unas cubas buenas que hacen 38 cántaros. Un  cubeto mediano. Dos  tinajas de barro. Medio cántaro de madera y un cuartillo de asta.

En el Portalón.- siete alqueres con sus raseros y otro para castañas sin rasero. Una romana grande que hace por el lado mayor 21 arrobas y 20 libras y por el  menor 7 arrobas y 8 libras.

En la Obliga.- 1 peso con 5 pesas de hierro: una de 8 libras, una de 4 libras, una de 2 libras, una 1 libra y una de ½ . una romana de 11 arrobas y 10 libras del lado mayor y por el menor 3 arrobas y 14 libras y una maroma que tiene 10 varas de largo y de grueso 2 dedos.

En la Abacería.- Una romana de  ¼ de arroba, un puchero de cobre y medidas de: media libra, un cuarterón, dos onzas, dos cuartos, y un cuarto de hojalata.

Sesión del  2 de abril de 1959. En Alcañices a dos de abril de mil ochocientos cincuenta y nueve. Reunidos en la sala capitular los señores que se relacionan al margen, acordaron: que en el próximo mercado saliese una comisión de esta corporación a hacer el repeso del pan cocido para evitar que se defraudase al público por indolencia de las autoridades. Dando parte, concluida que sea dicha operación, de las faltas que noten para adoptar las providencias convenientes.

Hasta las proximidades del siglo XX hubo en Alcañices una feria mensual de ganado y dos mercados semanales que se hacían en el  Portalón. Esta dependencia municipal estaba  en un edificio destinado a ello situado en el espacio que hay desde el Banco de Castilla a la tienda de Domingo y Tita.

El 10 de diciembre de 1863, el ayuntamiento y los vecinos acuerdan dirigirse al ministerio de Hacienda haciéndole saber que la contribución que tiene que pagar el ayuntamiento es excesiva y que no puede costearla, máxime cuando se ha creado una feria en San Vitero en la que lo que se les cobra a los ganaderos por ir es menos que lo que se cobra en Alcañices.